jueves, 25 de febrero de 2010

miércoles, 24 de febrero de 2010

Curriculum

Me levanto en la mañana y me propongo hacer de una vez por todas bien las cosas.
Me siento frente a la computadora y me aventuro a escribir sobre mí
Pienso qué decir de mi escasa experiencia personal, académica, laboral? Sería más fácil ser trivial aunque no debería fiarme de mi materialidad, de mi corporeidad avanzada.

Entonces mejor pienso en mis virtudes, y digo,
soy paciente, aunque suene a enfermo,
bueno quizás, pero no sería conveniente que quedara por escrito;
paso a la siguiente,
soy perseverante
y pienso
¿y eso a quien le importa?, además suena a perecedero.
Hago un esfuerzo y lo pienso mejor,
soy sincera,
aunque eso signifique que debería comenzar a enumerar mis defectos que entre otros
son
malhumorada,
ansiosa,
mentirosa,
jodida
pero por sobretodo me enojo con facilidad
tan fácilmente que me enojo al decirlo,
en realidad, estoy enojada desde que empecé a escribir esto,
ya fastidiada de mí y de mi curriculum

Cada segundo cuenta

Los cambios que nos rodean, hacen desaparecer por completo el universo del encuentro. El océano, inmenso, misterioso, eterno sonámbulo condenado a tantas presencias. La soledad es su anhelo. Se destiñe cada tela, cada trazo se vuelve impreciso, nada es perdurable, que cliché, tan certero. A veces es mejor callar, y el silencio cala por adentro y por afuera, pero vale, es una forma de estar en el mundo, quien sabe cual es la correcta.
No tengas miedo, yo también me he sentido así.

sábado, 6 de febrero de 2010